«Viaje de ida» de Biograd a Trogir
UN INFORME DE VIAJE DE EDMUND DVORAK
La recepción del barco en la base de Pitter en Biograd es tan amistosa y fluida como siempre. Todo lo que queremos y necesitamos está disponible en el amplio y bien equipado repertorio de este velero. Nuestras compras también se hacen rápidamente y se guardan en el barco.
El viento es suave, por lo que los novatos en navegación a bordo pueden familiarizarse bien. Menos de 2 horas y 8nm después, echamos el ancla en Veli Luka, un fondeadero bien protegido. Un rápido chapuzón en el agua para refrescarnos y poco después ya estamos en el bote auxiliar. Como siempre, el motor del bote neumático funciona perfectamente y alcanzamos la konoba «La Spuz» en la parte oriental de la bahía con bastante rapidez.
Textos y fotos proporcionados por Edmund Dvorak – ¡muchas gracias!
Bikini konoba
Los bikinis que cuelgan del techo en la parte delantera del pub se han convertido en su seña de identidad. La cocina se especializa principalmente en filetes, pescado a la parrilla y marisco. Sin embargo, si le gustan los cevapcici o los pljeskavica, no los encontrará en el menú. Optamos por pescado y pulpo a la parrilla. La comida no es barata, pero es muy sabrosa. Además, las fotos de la hermosa puesta de sol seguro que alegrarán los días grises de noviembre.
Tras un tranquilo desayuno y un largo baño en el mar, a la mañana siguiente nos dirigimos hacia el sur. Hemos dejado salir el aire de nuestro bote neumático. Así podemos guardarlo cómodamente en el garaje previsto y no tenemos que tensarlo ni sujetarlo a la cubierta. La cubierta de proa ofrece espacio suficiente para un bote auxiliar, pero siempre me gusta buscar un punto de vista diferente durante la travesía. Esto también nos permite observar durante mucho tiempo a los delfines que se cruzan en nuestro camino.
Crew Con 5-20 nudos de viento cruzamos – por el bien de nuestro , parcialmente rizados – a la isla de Kankan en el Uv. Potkucina. Hoy nos quedamos en la boya, disfrutamos de la galera y nos bañamos en el mar. La amplia plataforma de baño no sólo nos ofrece mucho espacio para tomar el sol, sino que también es ideal para la extensa ducha al aire libre de la tripulación por la noche.
Bahía de Solta
Llegamos a nuestro destino más lejano, la isla y la ciudad de Vis, el cuarto día de nuestras vacaciones. No queda sitio en el muelle de Habor Marina Kut, en la parte oriental de Vis. Así que amarramos nuestra NOSANIDA a una de las boyas libres y estamos deseando saltar al agua fresca.
Garaje para embarcaciones con compresor
Volvemos a inflar rápidamente la embarcación auxiliar con el compresor del garaje y, tras el corto trayecto hasta el embarcadero, nos dirigimos al puerto de transbordadores por la noche. Hay muchos restaurantes y esta vez elegimos el Mamma Mia 2, cuyo menú suena interesante. Además de pizzas, hamburguesas y marisco, también hay cuencos. No nos lo perdemos y los cuencos poke de pollo que pedimos nos conquistan por completo. Crew Los nuestros eligen pizza y marisco y quedan igualmente impresionados. Incluso los precios son moderados aquí.
Con la barriga llena, volvemos a pasear por el paseo marítimo. La maravillosa vista sobre toda la bahía nos hace detenernos una y otra vez para saborear el paisaje. De vuelta a bordo, rematamos el día con una copa de vino antes de que las suaves olas nos acunen hasta dormirnos.
Vista de nuestro campo de boyas desde el paseo marítimo
Al día siguiente se anuncia un fuerte viento del NO. No perdemos la oportunidad de ir a una panadería cercana y comprar fruta y otros artículos y recoger pan fresco y bollería para nuestro desayuno. Después -recién fortificados- toca «soltar amarras».
Con la mayor y el génova rizados, rodeamos el extremo oriental de la isla de Vis. Sin embargo, los 28 nudos del NW son demasiados para que crucemos en contra. Así que decidimos posponer la circunnavegación prevista de la isla a otro viaje y echamos el ancla en la bahía de Milna, todavía en la isla de Vis. Allí pasamos un día tranquilo holgazaneando, nadando mucho y buceando con tubo.
¡Las mesas se pueden bajar!
Eso cansa, así que hoy echamos la siesta juntos por la tarde. Bajamos las mesas de la bañera a la altura de los asientos y las cubrimos con cojines a juego para crear dos amplias zonas para tomar el sol y relajarnos los cuatro. Nos despedimos del sol poniente con un delicioso «sundowner» antes de «conjurar» unos espaguetis a la boloñesa en la bien equipada cocina. Esto siempre forma parte de nuestras vacaciones a vela.
A la mañana siguiente, nos damos cuenta de que el viento «se ha ido solo». Nos tomamos nuestro tiempo con el desayuno y un largo baño matutino. Pero cuando todavía no hay brisa, ponemos en marcha el «genova de hierro» y dejamos a Vis en la estela. El potente motor de 80 CV nos acerca rápida y cómodamente al destino de hoy, la isla de Brac. Durante el viaje, reservamos por teléfono un amarre en el puerto deportivo de Kanarija. Es una suerte, porque de lo contrario no habría ningún amarre disponible para nosotros.
NOSANIDA en el puerto deportivo Kanarija de Milna
Refrescarse en el mar no es posible en el puerto deportivo, así que las cómodas y limpias duchas son una verdadera bendición. Ahora sólo tenemos que prepararnos para tomar tierra y luego nos dirigimos a la ciudad. La corta distancia es un descanso para nuestras «piernas de mar». Estamos casi un poco «enfermos de tierra».
En Konoba Dupini, nos deleitamos con algunas especialidades croatas y animamos junto a otros invitados austriacos el partido de fútbol entre nuestra selección nacional y Polonia. Tras «nuestra victoria», paseamos por la animada ciudad de buen humor y tomamos un helado como recompensa. Ahora sólo falta la obligatoria «copa de buenas noches» antes de deslizarnos hacia el país de los sueños futbolísticos y náuticos.
Vista del puerto de Trogir desde la torre
Como esta vez hemos reservado un «viaje de ida», Trogir es nuestro último puerto para estas vacaciones.
Un viento de 6-10 nudos del NW nos proporciona unas horas más de buena navegación antes de entrar en el puerto deportivo de Trogir tras una parada para nadar y repostar. Tal y como nos han anunciado, todo funciona muy bien aquí en la base de Pitter. A primera hora de la tarde, tomamos un barco-taxi directamente hasta el embarcadero de la ciudad.
Todo el centro histórico de Trogir está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y sin duda merece la pena visitarlo. Como siempre que visitamos Trogir, nuestra primera parada es la fortaleza de Kamerlengo, construida en el siglo XV, cuando Trogir aún formaba parte de la República de Venecia. Construida en su día como defensa, la torre de la fortaleza sigue ofreciendo una magnífica vista del puerto y los alrededores.
Nuestra hambre se hace sentir poco a poco y nos abrimos paso entre los numerosos turistas que pueblan el casco antiguo. Hoy tenemos una «cena de capitanes» y queremos ir a Konoba Bonaca, en la parte norte del casco antiguo. Aquí es más tranquilo y un poco más fresco. Conocemos este restaurante desde hace tiempo y estamos deseando disfrutar de la buena cocina croata y de un servicio atento y amable.
La última cena de nuestro crucero corre -como siempre- a cargo del capitán, que la aprovecha para dar las gracias a su tripulación. Es una bonita tradición. Hemos pasado una semana maravillosa y estamos de acuerdo en que, sin duda, no han sido nuestras últimas vacaciones en velero con el NOSANIDA.
Bavaria C50 Estilo «Nosanida
El velero «Nosanida», un Bavaria C50 Style construido en 2022, ofrece espacio para 11 personas en 4+1 camarotes. Pitter Yachtcharter Está amarrado en la base de Marina Kornati, Biograd, Croacia.
El «Nosanida» ofrece un rendimiento y un confort de navegación de primera clase gracias a su vela mayor enrollable, foque autovirante, toldo bimini, piloto automático, capota antirociones, calefacción, bañera de teca, GPS chart plotter en la bañera, AIS y sistema de almacenamiento de baterías.
Elementos adicionales como la hélice de proa, las colchonetas de la bañera, el inversor, el inodoro eléctrico y el panel solar proporcionan aún más confort a bordo. Las elegantes ruedas de timón de composite son un detalle especialmente elegante.
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